La novela comienza con la traducción de un texto, sobre la batalla de las Cruzadas, que mandó a traducir un oficial nazi, Erich Kennen.
El oficial se ve atraído por una chica, mientras da un paseo por las calles parisinas. Durante el mismo, lo que consigue saber de ella es que toca el piano como los ángeles, que es atractiva, que no es muy amiga de los soldados alemanes y que al llamarla se dirigen a ella como "Señorita Mum".
La obsesión que comienza a tener por aquella mujer es tal que ordena a su secretario personal, Françoise, que averigüe todo lo que pueda sobre la pianista. En su investigación descubre tales datos: la chica se llama Marina Mun de Salcedo, es española. Huyó de la guerra de su país, donde sus padres fueron fusilados. Había sido enfermera. La apodan Espíritu Eterno por la luz blanca que desprende en sus conciertos. Vive sola, pero pasa largas horas en casa de su amiga Deray. Y por último, que es una apasionada de los libros.
Una noche, cuando Marina volvía a casa, después de una de las fiestas de Deray, que a ella tanto le aburrían, se disponía a darse un baño cuando de repente se encuentra con Erich, aunque la presencia de dos de sus hombres en la entrada ya le hizo presagiar algo; en un instante cuando ella quiso darse cuenta, ya había sido violada, aunque ella se resistió hasta quedar inconsciente en un forcejeo al golpearse la cabeza.
Después de lo sucedido, Erich decidió hacerse dueño de ella, por lo que se la llevo a vivir con él. Ella intentó huir en multitud de ocasiones, pero él siempre conseguía volver a traerla a casa. Lo único que le alivia es tener a Pancho, su perro, siempre a su lado. Ya que desde hace mucho todos los que quieren desaparecen, ya no sólo su familia, sino su amiga Deray, el hijo de ésta, un joven admirador que le regalaba pasteles.
Erich Kennen, además de estar obsesionado por Marina, no pensaba en otra cosa que en encontrar algo en aquellos cuatro documentos que había encontrado: el Evangelio de María Magdalena, la descripción de la batalla de las Navas de Tolosa, las teorías de Leonardo Da Vinci y el diario de la condesa de Bathory. Para ello también le pide ayuda a su adorada, hecho que los acerca más y les aporta confianza, por lo que finalmente ella deja de oponerse al acercamiento entre ambos. La pareja descubre que en todos los documentos aparece una misma mujer, Lilith.
El nazi enferma, y en su lecho de muerte convence a Marina de que ella es aquella mujer pelirroja que aparece en los documentos desde el origen del mundo y que su Espíritu es Eterno y vaga por la historia viendo como los que están a su lado muere, ella les arrebata la vida, emanado una luz blanca.
